Enrique Iglesias y Anna Kournikova, conocidos por mantener una vida notablemente privada a pesar de su estatus de lista A, recientemente han sido vistos con mayor frecuencia en público, especialmente con sus hijos. Una salida reciente a Miami ofreció una rara visión de la dinámica familiar, cuando Kournikova y su hijo, Nico, fueron fotografiados coordinando sus conjuntos con ropa deportiva negra a juego.
Las fotos, obtenidas por la revista Hello!, revelan una elección de estilo informal pero deliberada: tanto Kournikova como Nico optaron por conjuntos completamente negros, completos con Crocs negros. Nico mantuvo su apariencia simple con una camiseta negra y pantalones cortos, mientras que la elección de Kournikova puede haber sido un intento sutil de ocultar una creciente panza. Esta última aparición se suma a las especulaciones sobre la pareja que espera su cuarto hijo.
La pareja se conoció en diciembre de 2001 en el set del video musical de Iglesias para “Escape” y han permanecido juntos desde entonces, aunque nunca han confirmado públicamente un matrimonio. El nombre de Anna en Instagram, “Anna Kournikova Iglesias”, ha alimentado las especulaciones sobre una boda secreta.
Ahora tienen tres hijos: los gemelos Nicholas y Lucy, nacidos en diciembre de 2017, y su hija Mary “Masha”, nacida en enero de 2020. Fuentes cercanas a la pareja confirmaron a People en febrero de 2025 que priorizan un estilo de vida de bajo perfil. Según estas fuentes, Iglesias y Kournikova evitan intencionadamente excesivas apariciones públicas con sus hijos, prefiriendo centrarse en el tiempo privado en familia.
Los conjuntos a juego usados por Kournikova y Nico representan un pequeño pero revelador detalle sobre su dinámica familiar. Sugiere un esfuerzo consciente por presentar un frente unificado, incluso en entornos informales. Esto es consistente con su enfoque general hacia la fama, que siempre se ha caracterizado por la moderación y la negativa a compartir demasiado.
La preferencia de la pareja por la privacidad contrasta marcadamente con la de muchas otras parejas de celebridades que buscan activamente la atención de los medios. Al mantener un perfil bajo, Iglesias y Kournikova han logrado proteger a sus hijos del escrutinio implacable que a menudo acompaña a la fama. Esto les ha permitido criar a su familia en un entorno relativamente normal, a pesar de sus carreras de alto perfil.
En última instancia, los conjuntos a juego usados por Kournikova y Nico sirven como recordatorio de que incluso las parejas más famosas valoran la normalidad y la privacidad. Al priorizar el tiempo en familia sobre las apariciones públicas, Iglesias y Kournikova han creado un ambiente estable y sólido para sus hijos, a pesar de los desafíos de vivir en el centro de atención.
